Como no podía ser de otra manera, aquí tenemos una magnífica combinación que será todo un descubrimiento para los amantes del chocolate. La tarta consta de tres capas: la primera es un bizcocho de chocolate negro, a continuación otra capa de bavarois de chocolate con leche y para coronarla, una última capa de mousse de chocolate blanco. Para la decoración de la superficie se empleó un pergamino de chocolate negro, polvo y virutas de chocolate blanco y negro y un abanico de fresas naturales. Por último se escudillaron unos puntos de chantilly en la parte inferior de los laterales. ¡A disfrutar!
No hay comentarios:
Publicar un comentario